miércoles, 30 de mayo de 2012

Una paz sin olvido


LA EXPEDICIÓN, 2

Eso que con el tiempo pasa (¿se dice así?)
tiembla en las cuerdas sacudidas
suavemente, sin ningún esfuerzo, sonando
bajo un cielo que no parece posible
en un plano de eternidad.

Esa humedad atraviesa la tierra
desprevenida. Se pone esa condición
para que haya un secreto.
Quien no desee una paz sin olvido
que baje la vista, o que
levante la mano.


Poema de Antonio Méndez Rubio, del libro Siempre y cuando (Madrid, Abada, 2011).

lunes, 28 de mayo de 2012

Pri Mamuta


Lectura en la Universidad de Sofía, dentro del ciclo "Pri Mamuta"
junto a Marii Rosen, cantante de Help me Jones

sábado, 12 de mayo de 2012

Así de sola está nuestra generación



HIMNO TEMPORAL

Como mira el pescador la orilla
al principio de la noche, cuando el viento
lo empuja hacia el paso de la luna,

y en sí repite las figuras del tiempo
inacabable, y se exalta con la memoria
evocando el regreso

y de repente lo captura el luminoso
despertar de la presa
olvidándose así de todo, menos
del alto volumen y de la viva
fuerza del mar, arrojando
con las redes la límpida familia
en el vasto olvido...

así de sola está nuestra generación,
Dios mío. Mis palabras persuaden una patria
más lejana, de eternas ramas susurrantes
y tupidas.

Es incierta la nueva dirección.
Y, a veces, en fulgentes simulacros
se abrazan los recuerdos. Pero, ¿de qué sirve
tumbarse en el pasado? Sangre y linfa
brotan, mas incierto es el respiro.

Ruinosas tierras deberemos
cultivar. Pero hazme una promesa
de las tuyas: se abre en los días una pregunta
infinita. Fragorosas aguas las orillas
conocerán de tu talla.

Tuya, y no solo: el hombre sobrevive
a tu paz. Pero sé tú el surco
fecundo, la semilla alada, la mano colma.


Poema de Giovanni Raboni, del libro Gesta Romanorum (Vaso Roto, 2011; edición de Luca Daino y Juan Carlos Reche, traducción de Juan Carlos Reche).

martes, 8 de mayo de 2012

Donde el Mamut


Científicos, poetas, músicos, robots: encuentros en torno a lo humano

Cuándo: Lunes, 14 de mayo de 2012, a las 19:00 h
Dónde: Aula 65, ala sur del Rectorado de la Universidad de Sofía

Poesía: Juan Antonio Bernier
Música: Help me Jones
Ciencia: Pablo Cañamares, "Segunda ley de la termodinámica"

lunes, 7 de mayo de 2012

Un "yo" sustituido por un "aquí"


Llevar una apuesta estética hasta las últimas consecuencias entraña un riesgo que no todos los escritores están dispuestos a asumir. Consciente de que no puede ni debe dejar indiferente al lector con su último poemario, Árboles con tronco pintado de blanco (Pre-textos), Juan Antonio Bernier lo hace desde la archiconocida seguidilla de García Lorca que lo abre.
Con ella pretende, por un lado, dejar claro que este libro es fruto de una evolución lógica desde los principios estéticos planteados en Así procede el pájaro –editado hace siete años por la misma editorial–, por otro, reivindicar la importancia axial del símbolo a la hora de construir una poesía sencilla, esencial, que emplea una palabra depurada de los excesos a los que se ha visto sometida por algunos autores y que pretende indagar sin asideros firmes en la compleja interioridad de un “yo” fragmentado que experimenta, con inseguridad, las limitaciones del propio lenguaje al querer comprender el mundo que le rodea. Esta mirada es conflictiva en tanto y en cuanto el hombre ha perdido la seguridad de las verdades absolutas; por ello, el “yo” se diluye y es sustituido por el “aquí” (“Aquí: / noción aproximada sucedánea / de sujeto”), entendido como un punto de encuentro dialógico entre aquel, el lector, cuyo papel activo debe completar la percepción fragmentada que el poema le presenta, y la realidad en la que confluyen tanto el lector como la reproducción del mundo ofrecida por el sujeto. Y es en esta misteriosa intersección llamada baricentro donde juega un papel crucial el símbolo, pues a través de él se definen los tres vértices de este triángulo isósceles que es el poema, cuyas medianas son el propio lenguaje, que conforme avanza el poemario se reivindica no como un instrumento útil para acercarnos al conocimiento, sino como el conocimiento mismo: “Un brote del acorde del sentido / despierta sobre el campo. / La cara B de este paisaje / es un castillo de hiedra. / Un turista de hiedra / desenfoca su cámara; / le parece fenómeno / contribuir al noúmeno”. 
Por ello, Bernier ha adelgazado la anécdota del poema, reducido a mero apunte, a mera sugerencia, con la que intenta capturar una serie de sensaciones capaces de fecundar esta fértil “área de sol”. No en vano, suele hablarse del minimalismo como uno de los rasgos definitorios de su poética ("Volveremos a Delfos", "Perspectiva Nevski" o "Familia ciclista"), al que habría que añadir el cromatismo (como se observa tanto en el citado poema "Perspectiva Nevski" como en el magnífico haiku que cierra el libro: “Amarillean / porque el sol es azul / las hojas verdes”), la profundización en universos artísticos ya tocados por él como la música ("Nuestro poema" o "El poema de Fernanda") y la exploración de otros nuevos como la pintura ("Un relato pictórico causal") o la fotografía y el diseño ("Blank"), sin olvidar que, incluso en los poemas de inequívoco tono amoroso ("Anisa", "Un radiador bajo la ventana" o "No sé, quizás, supongo, pero"), en los que la anécdota es más evidente, recurre a una eficaz técnica cinematográfica o pictórica que lleva al lector a adoptar un papel activo al recomponer el sentido. Con todo, ni la sencillez ni la brevedad ni la depuración del lenguaje ni el minimalismo son el objetivo que pretende alcanzar el autor, sino la consecuencia de la búsqueda de la simple expresión, en la que se funden a partes iguales cuidado estético y pensamiento.

Reseña de Árboles con tronco pintado de blanco, publicada por Francisco Onieva en Cuadernos del Sur (número 1141, 28 de abril de 2012).

martes, 1 de mayo de 2012

Todor Todorov (Sofía, 1977)


MEMORIA NOCTURNA

frases hispanoides
fragmentos de poemas
estrofas americanas
la escarcha sobre los libros
y nosotros
con nubes ocultas bajo los párpados
espiamos a la luna
por un rulo
telescópicos y despeinados
navegamos el insomnio
como un libro prohibido
elegantemente confusos

Juan dice:
la sangre de la poesía
se decanta en una pipeta particular
hecha con el ámbar cristalino de la uva
dentro del sueño de una virgen rubia
se decanta, dice
lenta
y cuidadosamente
para que no se desborde

David susurra el secreto de la tinta
de un idioma
que se habla sólo por la noche
y extiende sus amantes como sábanas

Daniel inventa palabras
como eudemonia, euforia
eucalipto
para las que se necesitan nuevos alfabetos
técnicas, terapias
y letras
parecidas a caballos
animales esteparios
que perseguimos
en la oscuridad

luego liamos algunas palabras
y las fumamos
en lugar de abrir diccionarios
interpretamos el humo
nos perdemos en la criptografía
de significados no escritos
con los que se teje la noche
acordamos
que la literatura es para nómadas
y afirmándolo
invocamos el espíritu de de Lawrence y Eliot

y pienso
en mis amigos
frases hispanoides
fragmentos de poemas
estrofas americanas
escarcha sobre los libros

y en cómo estamos atrapados
en las frágiles horas
del pájaro